Viernes de despedidas.

Hoy he llegado un poco antes para ayudar a la maestra a preparar la clase para la llegada de los alumnos. Después todas las maestras fuimos al patio para recibir a los alumnos. Cuando la puerta del colegio se cerró subimos al aula donde el ayudante del día realizó la rutina en la asamblea (tiempo, días de la semana, abecedario...) tanto en español como en inglés. Además en la asamblea como es usual tratamos conflictos o temas de relevancia en este caso hablamos con un alumnos sobre su falta a clase el día anterior (este alumno suele faltar mucho y tiene problemas de aprendizaje por ello). En un inicio nos mintió diciendo que había estado malo, pero después admitió que el padre no había tenido ganas de llevarlo al colegio. La profesora le dijo que no pasaba nada pero que no debía mentir. También se repasó conceptos sobre el desierto (animales, plantas, tuareg...). En este momento destaco la participación y razonamiento de una de las alumnas que recuerda gran parte de lo aprendido. 

Tras el repaso la profesora explicó dos fichas: una sobre la letra "h" donde trabajan el trazo así como palabras que contienen esta letra, para realizarlas durante el fin de semana . La otra era sobre los Tuareg, en el que tienen que encontrar las cinco diferencias y seguir un patrón establecido. En general los niños no tuvieron muchos problemas para realizar la ficha, puse mayor atención a uno de los alumnos que tiene problemas de aprendizaje y también la hizo correctamente. 

Después vino la maestra de inglés que estuvo hablando con los niños sobre los medios de comunicación, trabajando los nombres y su pronunciación. Después explicó una ficha que trataba sobre dicho tema donde los niños debían picar con el punzón la silueta de formas de comunicación moderna y pegarlo en el lugar correspondiente. Trabajando así la motricidad fina y los conceptos aprendidos. Los niños prestaron especial atención, al finalizar podían jugar libremente. 

Tras ello, los niños desayunaron y bajaron al recreo donde antes de subir al aula recogieron hojas para los gusanos de seda. Al llegar al aula se realizó la clase de relajación con música clásica y después se realizó una asamblea donde los niños y la maestra me dieron unos regalos de recuerdo y nos hicimos unas fotos. Mostrando muestras de cariño y algo de tristeza por mi partida. Luego, yo les dí un detalle a los alumnos y a la maestra que recibieron muy contentos y con la promesa de vernos pronto.

Como últimas actividades, los alumnos les dieron las hojas de morera a los gusanos de seda y observamos los cambios que se iban produciendo en ellos. Luego, los alumnos y alumnas cogieron sus mochilas y chaquetas y bajamos al patio donde jugaron con tizas libremente hasta la hora de salida. 

Jueves de arcilla.

Hoy he ido un poco antes a clase y junto con mi maestra profesional hemos preparado el aula para trabajar con los alumnos. Después hemos ido al patio con las demás maestras de educación infantil para recibir a los alumnos. Cuando iban llegando casi todos los alumnos me reciben ya con un beso al igual que a las demás maestras. Incluso se quedan a mi lado esperando que suene la campana para ir a clase.

Al sonar la campana, fuimos al aula de usos múltiples para trabajar la conciencia fonológica. Donde destacaré algunos problemas de comprensión tanto de los ejercicios de enumerar los sonidos de las palabras, comprensión del significado de las palabras y de pronunciación de los sonidos "r". También existen algunos problemas a la hora de categorizar (aves e insectos) por parte de uno de los alumnos pudiendo producirse por la falta de atención en las explicaciones de la maestra. Durante esta clase además de los ejercicios nombrados se contó un cuento para trabajar la letra “ch” llamado “Chivo Chivon”. Donde los alumnos practican el sonido de esta letra en distintas palabras, aprender vocabulario y se ayuda a los alumnos a ir teniendo una lectura comprensiva a través de la realización de preguntas sobre el cuento.

Después subimos al aula donde se realizó una asamblea donde varios alumnos me preguntaron si me iba ya del colegio. Mostrándose tristes y preocupados. Les dije que aunque me vaya iré a visitarlos de vez en cuando y que el año que viene si puedo estaré en el mismo colegio y nos podremos ver. Además se contó el cuento de la “Mudita Ch”, donde además se nombraron algunas palabras que contienen la “Ch”, así como su pronunciación.  Además se les recordó todo lo aprendido sobre el desierto y se les explicó dos fichas relacionada con este tema. Donde se trabajaban la direccionalidad (derecha e izquierda), los colores, y los números (contar el número de flores de los cactus). Además de una ficha para trabajar el trazo de la letra (ch) donde se trabajaban también los colores y la motricidad fina.

Tras ello, los alumnos sacaron el desayuno que incluía piezas de fruta (para los alumnos con familias de pocos recursos). Y también para el resto de alumnos donde especialmente la pera gustaba y en general todos probaron de ella.

Durante el recreo estuve trabajando en el diario de clase, terminando el diseño de unas camisetas para las Olimpiadas de los alumnos y colgando unas mariposas por el aula que yo misma había realizado en mi casa para decorar el aula con  motivo de la llegada de la primavera. Cuando los alumnos volvieron del recreo se lavaron las manos  e hicimos clase de relajación con música clásica (que vamos cambiando todos los días). Donde en general los alumnos reposaron bien exceptuando a dos alumnos que charlaban, por lo que les anime a estar en silencio y para ello utilice el recurso de las cosquillitas en la cabeza.

Mientras la maestra continuaba con la relajación prepare los materiales necesarios para continuar con mi intervención educativa en el aula trabajando el tema de los “Tuareg y el desierto”. En este caso los alumnos elaborarían un vaso de arcilla con un método sencillo mostrado por mí como ejemplo. La forma en la que se llevó a cabo fue la siguiente se preparó una mesa (barreño con agua, plásticos, arcilla y palillos). Los alumnos que fueran terminando las fichas iniciadas en la mañana se fueron pasando a mi mesa donde primero recordábamos todo lo aprendido sobre los Tuareg y después se les explicó paso a paso la forma de hacer el vaso. 

Se realizaron dos tandas (5 alumnos en la primera y 4 en la segunda) de alumnos a los que se les atendía de forma bastante individualizada (ya que son eran 9 alumnos). Los alumnos que iban acabando podían realizar una figura libre (hicieron un Tuareg, una pulsera y una pelota decorada). Y tras lavarse las manos podían jugar libremente a lo que quisieran. En la segunda tanda la maestra y yo tuvimos que casi hacer a dos alumnos  sus vasos uno de ellos por falta de soltura en la motricidad fina y atención y el otro alumno por falta de atención. 

Miércoles de "Comida con los Tuareg"

Hoy he ido un poco antes y he preparado la clase, dejando mis cosas además mis cosas. Luego he bajado al patio con las demás maestras para recibir a los alumnos y alumnas. Cuando ya terminó la hora de entrada fuimos a clase donde se realizó una asamblea donde el alumno nuevo realizó la rutina. Pudiendo ver que poco a poco va hablando un poco más. Además en la asamblea se habló con uno de los alumnos que había pegado a otro (flojo y jugando) y remarcando que no se debe pegar ni enserio ni de broma. Después se les explicó una ficha sobre el desierto (cactus) donde debían contar el número total de flores así como colorear solo los cactus con flores rosas. Además de que los niños que no terminaron la ficha del día anterior la terminaran.

Poco después llegó la maestra de religión junto con los niños de cuatro años. Por lo que se les dijo a los alumnos que guardaran los cuadernos y le prestaran atención. En esta ocasión la profesora les habló sobre el primer día de semana santa y les puso un vídeo para que conocieran la historia de una forma más visual y lúdica. Después la profesora explicó y repartió una ficha de una “palma” que los niños colorearían y posteriormente decorarían con purpurina.

Al finalizar la clase los alumnos/ as sacaron el desayuno. Mientras yo realice el diseño de las camisetas para las olimpiadas. Cuando acabaron de comer los niños se fueron al patio y yo me quede en el aula preparando la actividad de la “comida con los tuareg”. Esta actividad se puso en marcha tras la clase de relajación mientras ultimaba los últimos detalles. Con esta actividad se pretendía acercar el modo de vida de los tuareg, aprendiendo de una forma más significativa sus costumbres, objetos, comidas…. Los alumnos probaron té, cus-cus y dátiles comentando gustos, sabores y aprovechando su curiosidad. Por lo general la actividad ha gustado a todos a excepción de un alumno que no mostraba interés (suele tener problemas de atención). Además al acabar la comida se mostró una tetera tradicional con la que cada uno de los alumnos pudo pedir un deseo.

Tras ello, repartimos pañuelos a todos los alumnos y alumnas para que disfrazaran de verdaderos tuareg. Después mandamos a los alumnos a lavarse las manos para realizar una ficha que explicó la maestra. Mientras yo, recogí mi actividad y mis cosas ya que hoy teníamos seminario y salgo un poco antes.

Martes de mucho trabajo.

Hoy he ido un poco antes de la hora de apertura del colegio para subir las persianas y bajar las sillas de los alumnos/as. Después fui al patio para recibir a los alumnos, ya que mi tutora profesional estaba teniendo una reunión con las otras maestras/os y demás profesionales educativos del centro (fue breve unos quince minutos). Una de las alumnas en ese momento comenzó a llorar. La llamé y le pregunté que le pasaba y me dijo que quería sus muñecos. Le recordé que antes de llorar hay que buscar una solución y si no se encuentra decírselo a la maestra.

Cuando sonó la campana fuimos al aula de usos múltiples para trabajar la conciencia fonológica: contar los sonidos, clasificar animales, practicar la lectura... son algunos de los ejercicios que realizamos con los alumnos y alumnas. Mostrando en cada uno de los alumnos las dificultades que tienen en la lengua (tanto oral como escrita). Como aspecto a destacar se puso especial hincapié en la letra "ch". Al finalizar, fuimos al aula donde la maestra les contó el cuento de la letra "h" de Letrilandia, donde les recordó que no suena y practicaron el trazo con el dedo. Mientras yo ayudaba con el diseño para las camisetas de las olimpiadas que celebran en el cole. Explicándoles dos fichas, la primera era sobre la noche del desierto donde debían seguir unas pautas (colorear las estrellas que estaban juntas de naranja y las separadas de amarillo). La segunda era la letra "h" que debían colorear con ceras y pintura, por detrás de dicho folio debían resolver unas sumas y restas así como realizar un dibujo libre. En este momento e de destacar la falta de atención e interés de uno de los alumnos que no escuchaba la explicación y se dedicaba a merodear por el aula. 

Después les dijimos a los alumnos que dejaran los deberes y sacaran el desayuno. Notando que el alumno que tenia problemas con la comida (no le gustaban los batidos que le daba su madre) ya estaba resulto pues traía un zumo que le gustaba. En este momento, uno de los alumnos se calló por estar subido en la mesa, en primer lugar le pregunté si estaba bien (si lo estaba) y en segundo le advertí que fuera la última vez que se subía a las mesas o a las sillas. Me contestó que no lo iba a hacer más.  Al sonar la campana los alumnos fueron al recreo con la tutora profesional y yo me quede en el aula. Aprovechando para limpiar las mesas y ordenar un poco los juguetes. 

Al regresar pusimos música e hicimos un poco de relajación. Tras ello, se realizó una asamblea donde se trabajó la primavera además de un conflicto entre dos alumnos en el cual uno le pegó una patada en la ceja al otro. Donde se recordó que no hay que pegar a los demás bajo ningún concepto y que cuando pase debemos decírselo a la maestra. El alumno "agresor" mostraba arrepentimiento aunque no hablaba cuando la maestra le preguntaba por qué lo había hecho.  

Tras ello, la maestra explicó una ficha mas donde se trabajan las formas (cuadrado, círculo...) los números (su trazo) y los colores. Para ello deben fijarse en la leyenda y seguir esas pautas para realizar la ficha correctamente. Cuando los alumnos acabaran las fichas que se habían mandado podían trabajar de forma libre. En este momento he de destacar que varios alumnos me pedían ayuda queriendo sentarse a mi lado para trabajar. Además uno de ellos con problemas de concentración me pidió justamente sentarse a mi lado porque no se concentraba. Me sorprendió que el mismo se diera cuenta de su poca capacidad para mantener la atención. Por lo que les ayudé hasta que fue la hora. Y los alumnos cogieron sus mochilas y chaquetas y los llevamos al patio donde los recogieron las monitoras del comedor. 

Lunes de risas y llantos

El día comenzó un poco de la hora lectiva, cuando solté mis cosas en el aula y preparé el aula para dar clases. Después junto con las maestras fui a recibir a los alumnos. En este momento destaco la falta de uno de ellos. Al sonar la campana llevamos a los alumnos al aula de usos múltiples donde trabajamos la conciencia fonológica a través de un cuento (visualizado tanto en libro como en la pantalla digital) "El chico Chivón" tratando dicho cuento sobre la "ch". En este cuento se le realizan preguntas de comprensión así como entrenar con palabras que contengan "ch. Los alumnos en general estaban atentos. Aunque algunos de ellos no participaban y otros como nuestra alumna bilingüe o nuestro alumno con bajo nivel educativo tienen problemas tanto en pronunciación como en comprensión del significado de las palabras. 

Después los alumnos subieron al aula donde se realizó la asamblea con nuestro alumno con dificultades educativas. Donde pude ver fallos en el habla y en conceptos básicos como el orden y reconocimiento de los números o los días de la semana. Además en la asamblea se enseñó y habló sobre los gusanos de seda. Cuando llegó la profesora de religión los alumnos que no dan esta clase se fueron con la tutora profesional y los demás alumnos junto con la clase de cuatro años si que asistieron. En esta ocasión la maestra habló un poco sobre la semana santa e hizo tres grupos a los que les repartió un gran dibujo de un nazareno que pudieron colorear con pinturas y pinceles. Durante la pintura una de las alumnas se enfadó y se puso a llorar porque no quería pintar con los demás. Intenté hablar con ella y hacerle entender que hay que compartir. Ante la negativa dejé que se tranquilizara y la maestra le permitió dibujar sola. 

Cuando acabo la clase de religión los alumnos de cuatro años se fueron a su respectiva clase y los alumnos sacaron su comida. De nuevo uno de los alumnos que tiene problemas a la hora de la comida le cambie el zumo ya que el que trae no le gusta. Otra alumna me dijo que no se quería comer su bocadillo, le pregunté si era por la mantequilla ( ya me había comentado anteriormente que odia la mantequilla) y la maestra se la quitó del pan. En este momento además dos alumnos discutieron sobre el origen de un superhéroe (Flash) de forma acalorada. En un inicio dejé que lo intentaran resolver solos pero ante la inminente pelea les propuse que yo me informaría del tema y veríamos quien tenía razón sin enfadarnos. 

Después del recreo los alumnos hicieron un poco de relajación. Y luego se hizo una asamblea donde zanjamos el tema de "Flash" ya que ambos alumnos tenían parte de  razón. Por otro lado durante el recreo tres niños de la clase se pelearon (dos de ellos le pegaron a otro). Y se trató el tema además de advertirles que cuando la profesora les diga que vengan durante una pelea para hablar los alumnos deben obedecer y no chillar nunca. Tras ello, la maestra explicó algunas fichas sobre la primavera, contó un breve cuento, una poesía que los alumnos repitieron y una canción. 

Luego, expliqué mi actividad "La maleta mágica" donde los alumnos pudieron clasificar ropa, reforzar conceptos como: su utilidad medios de transporte, colores y nombres (en inglés) conocer nuevos objetos y su utilidad (prismáticos, cámara instantánea, pasaporte...) también compararon tamaños (zapatillas, ropa de adulto) usaron nuevas tecnologías (cámara digital). Mostraron mucha atención en general, curiosidad y participación. 

Tras la actividad los alumnos podían jugar a lo que quisieran hasta que fue la hora, momento en el que cogieron sus mochilas y chaquetas y fuimos bajando para que las monitoras del comedor los recogiera. Durante la bajada con las escaleras dos alumnas querían coger mi mano y asentí pero una de ellas empezó a quejarse y a protestar (incluso se tiró en el suelo) porque no quería que la otra alumna me cogiera de la mano. Hablé con ella y le dije que no se puede ser caprichosa y que yo los quiero a todos por igual. Le dije que si quería venir estaba más que contenta pero que no iba a hacer lo que ella quisiera. Al despedirme de ambas me dieron un beso aunque la que se enfadó con cara de pocos amigos. Quejándose de nuevo y diciendo que quería irse a casa. 

Viernes de "Un millón de pasos"

Hoy llegué un poco antes para preparar el aula. Después baje con las demás maestras al patio para recibir los alumnos. Cuando llegaron todos subimos al aula donde la maestra realizó las rutinas de la asamblea ademas de hablar de los hábitos saludables (comidas y deportes)  y de la excursión. Mientras yo acababa el diseño de algunos alumnos que no tenían sus camisetas amarillas con el logo (huellas de pies). Se las pusimos a todos y les dijimos que bebieran agua e hicieran pipí. 

Tras ello todos los alumnos, maestros y padres que querían participar en la marcha fuimos al patio. Durante la marcha he de destacar algunos aspectos importantes: 

- Dos alumnas se emparejaron, siendo inusual que jueguen juntas.

- Los alumnos y alumnas se comportaron en general muy bien tanto en el trayecto como en los ejercicios de Chi-Kung. 

- Me emparejé con uno de los alumnos que tiene problemas de comportamiento y a nivel educativo, aprovechando el trayecto para repasar conceptos que desconoce: colores, formas, letras... 

Al llegar al aula los alumnos se lavaron las manos y desayunaron. Cuando acabaron, se fueron al recreo y al llegar a la clase los alumnos, se realizó una asamblea donde se les enseñó la caja de los gusanos de seda y se habló sobre los cambios que observaban en ellos. Por último los alumnos colorearon y sacaron de la guía un regalo para el día del padre ( a los alumnos les dijimos que eran para los padres y madres por algunos alumnos). Después conforme iban acabando podían ir a jugar con lo que ellos quisieran (juguetes, plastilina, colorear...) mientras la maestra y yo ensartábamos con hilo de plástico azul. 

Finalmente, los niños recogieron los juguetes, cogieron sus mochilas, chaquetas... y visualizaron un vídeo de dibujos sobre el desierto hasta que sonó la campana. Momento en el que bajamos a los niños para que fueran al comedor. 

Visita de la Policía.

El día comenzó con el recibimiento de los alumnos tras llegar un rato antes para arreglar el aula (levantar las persianas, dejar el bolso, bajar las sillas...). Después fuimos con los alumnos y alumnas al aula de usos múltiples donde repasaron las consonantes y practicaron la lectura con ayuda de la pedagoga que asistió con dos alumnos de primaria que necesitan apoyo. Notando en este momento la dificultad por parte de dos alumnos dificultad en la pronunciación de la letra "r". 

Después subimos al aula donde realizamos una asamblea recordándoles el evento que teníamos: "la visita de la policía". Aprovechando el tema se trataron las profesiones, los medios de transportes... además de tratar dos conflictos que habían surgido en el aula de usos múltiples. El primero, fue por una alumna a la al sentarse otro alumno de dió sin querer en la rodilla (fui testigo y solo fue un roce) y ella tuvo un berrinche.

Tras ello, se la sentó a mi lado hasta que se tranquilizara y como consecuencia otra alumna se puso a llorar porque ella también quería estar a mi lado. Una vez terminada la asamblea los alumnos desayunaron, destacando que uno de los alumnos que siempre tiene problemas con la comida me escondió que tenía un plátano para la comida. Le dije que no me volviera a engañar que yo lo noto todo y le dije que se comiera un poco. En este momento uno de los alumnos que había traído una sorpresa para “alguien” anuncio que el regalo era para la “Seño Vero”. Le dije que me encantaba y se lo mostré a los alumnos que tenían curiosidad. Luego los alumnos se fueron al recreo, cuando sonó la campana subieron al aula donde bebieron agua, se lavaron las manos e hicieron un poco de relajación con música clásica.   

Después puse los niños en fila y los llevé al recreo por la visita de los policías. En la charla se habló del trabajo de los distintos componentes del cuerpo policial así como una exposición del trabajo de los perros policías. Luego permitieron que todos los alumnos vieran y tocaran material usado en su trabajo: motos, cascos, coche policial, perros... De esta visita he de destacar la comprensión por parte de uno de los alumnos que no podía tocas a los perros y que a pesar de ello no protesto. Al acabar la visita llevamos a los alumnos al aula. Donde en primer lugar, se lavaron las manos y después se explicó y repasó: los números (orden y cantidad), los colores y las formas (rectas y curvas) donde además por supuesto se trabaja el trazo a través de la motricidad fina. 

Por último hubo un pequeño incidente con uno de los alumnos que se hizo de vientre. Por lo que me encargué de limpiarlo en el baño mientras que la maestra llamaba a su casa sin éxito alguno. Por suerte, había ropa de cambio que pudimos usar. Al acabar los alumnos cogieron sus mochilas y chaquetas y bajaron al patio para que las monitoras del aula los recogieran. 

¡Miércoles con un nuevo amigo!

Hoy he llegado un poco antes al aula para llevar el material necesario para mi intervención educativa. Además aproveche para preparar el aula (subir las persianas, bajar las sillas de los alumnos…). Lo primero que he de mencionar es que mi tutora profesional hoy iba a llegar más tarde (sobre las 10:00) por lo que junto con la sustituta recibimos a los alumnos y alumnas. En segundo lugar, se incorporó un nuevo alumno procedente de Salamanca al que presentamos en el aula de usos múltiple para realizar las actividades fonológicas. Le expliqué a la sustituta por dónde íbamos y lo que tocaba hoy. Repasando conceptos, practicando los sonidos de las palabras y repasando la letra “v”.

Al poco tiempo, llegó al aula continuando con las actividades. Donde destacaría la dificultad a la hora de separar sonidos de las palabras y el comportamiento de dos de los alumnos. Tras ello, fuimos al aula donde realizamos una asamblea donde no solo hablamos de los sucesos, temores… que nos cuentan los alumnos sino que como todos los días el encargado repasa los conceptos del tiempo, asistentes, días de la semana, números, abecedario…tanto en inglés como en español. Después llegó la profesora de religión que además de contarles un cuento, les dio una ficha sobre el padre nuestro que debían decorar con una imagen de Jesús. Aprovechando un pequeño conflicto además remarcó la importancia de saber perdonar, y de ser amables con los demás.

Después llegó la profesora de inglés que repasaron los medios de transporte y realizaron una ficha sobre el tema. En este momento debo destacar que se tuvo que separar un alumno de los demás por su excesiva actividad motriz y nerviosismo. Mientras, la mi tutora profesional realizaba las autorizaciones de los alumnos para la excursión de “Un millón de pasos” y yo realicé el diseño de las camisetas que llevarán los alumnos y alumnas.

Tras la clase de inglés los alumnos comieron sus respectivos desayunos además de la fruta que ofrece el centro diariamente. Uno de los alumnos solo comió la fruta, no tocó su desayuno. Al acabarlo se fueron al recreo, y mientras termine decorar el aula con el móvil que se hizo el día anterior.

Cuando los niños volvieron del recreo se hizo relajación con música clásica de fondo. Y después la maestra hizo una asamblea con los alumnos donde mostró el progreso en el crecimiento de los gusanos de seda del aula.

Cuando acabaron procedí a llevar a cabo una actividad donde entre todos los alumnos crearíamos un oasis mientras recordábamos, reforzábamos y aprendíamos nuevos conceptos y datos referentes al desierto, a su fauna y a su flora. Para ello los alumnos mediante turnos tamizaron la arena, hicieron agujeros para los cactus (su manejo se limitaba a las maestras) y pusimos un cuenco con agua a modo de lago. Además llevé dos tipos distintos de cactus de los hablamos, tocamos y olimos. Comparando sus texturas, colores y olores entre ellos por dentro y fuera (ayudados por una lupa) .También se hizo un proceso similar con los dos tipos de arenas utilizadas en la creación del oasis.

Al finalizar la actividad, todos los alumnos fuimos a lavarnos las manos y la profesora explicó una ficha sobre la “v” en la que además de trabajar el trazo los alumnos debían reconocer el sonido en distas palabras de dibujos que estaban plasmados. Al acabar la ficha los alumnos podían jugar, recortar, dibujar… libremente. Preparándose, por último para ir al comedor y visualizando un vídeo sobre el desierto mientras las monitoras venían a recogerlos.

Lo más relevante del día:

- Los alumnos me siguen pidiendo que les recorte el mapa que hicieron el lunes y juegan por la clase con ellos (denota que la actividad les gustó).

 - Admiran la decoración que ellos mismos realizaron el martes.

- Me preguntan sobre qué actividad prepararé mañana (se muestran ansiosos y expectantes).

- No tengo problemas de participación, es más lo que cuesta es que sepan turnase para hacerlas. 

Día lluvioso y tranquilo.

Hoy he llegado un poco antes para ver donde tenía el material necesario para llevar a cabo la segunda actividad de mi intervención. Debido a la lluvia los alumnos entraron directamente al pabellón de educación infantil acompañados por los familiares. 

Después fuimos al aula de usos múltiples donde ayudadas por la pedagoga trabajamos la conciencia fonológica donde trabajamos los sonidos de las consonantes, así como la letra "v" a través de un cuento y una canción. Donde los niños escuchan y nombran palabras con dicha letra. De este momento destaco la dificultad por parte de nuestra alumna bilingüe y la falta de atención y actividad motriz de otro alumno. 

Al finalizar esta clase subimos al aula donde el encargado del día realizó las actividades propias de la asamblea. Mientras yo preparaba los materiales para mi intervención. Después les explique la actividad "El móvil del desierto" donde los niños colorearon, picaron/recortaron y pegaron las figuras correspondientes. Trabajando los colores, las formas y datos sobre el desierto incluyendo el inglés como herramienta. Respecto a la actividad tuvo bastante éxito, aunque dos alumnos tardaron algo más de tiempo acabaron muy contentos con el resultado. Al acabar, durante el recreo pude colgar el primer móvil y cuando los alumnos lo vieron les encantó. 

Después de dicha actividad y de la correspondiente clase de relajación donde todos los días escuchamos algunas obras de música clásica. La profesora explicó tres fichas: una sobre el número nueve, donde trabajaban su trazo y su reconocimiento visual. La segunda ficha repasaba todos los números especialmente el nueve, teniendo que fijarse en un patrón y usar la lógica para rellenar los huecos. Utilizando la pizarra para repasar además las sumas con los alumnos donde destacan niños con una gran comprensión matemática y otros niños que les cuesta más. 

 Por último se contó el cuento de la letra "v" de Letrilandia, repasando sus sonidos y explicó una ficha donde se trabajaba su trazo con pintura. Una vez explicado todo me puse en la mesa con los niños ayudando de forma individual a cada uno de los alumnos que los necesitaban. Intentando hacer de una actividad más rutinaria algo entretenido. Al acabar podían jugar libremente a lo que quisieran, cocinitas, coches, construcciones, recortables...

¡Lunes de intervención!

Hoy como los últimos días he llegado un poco antes de la hora de recibimiento de los alumnos para llevar al aula algunos materiales. Ya que siempre se me ocurren formas y materiales que podrían mejorar las actividades. Después de recibir a los alumnos y que dejaran las mochilas hemos ido al patio para hacer Chi-kung. Los alumnos se mostraban hoy más atentos a los ejercicios y no se alborotaban. 

Luego, hemos ido a la clase donde el ayudante de hoy ha hecho la rutina de la asamblea. Además hemos hablado sobre las actividades que se llevarán a cabo el jueves (visita de la policía) y el viernes (marcha de los mil pasos). En esta última no se mostraban interesados y más de uno insinuó que no iba a venir ese día al colegio.  

Después la maestra ha explicado una ficha sobre el número nueve donde practicarían su trazo y su equivalencia. Para ello se ha ayudado de las regletas para que los niños trabajaran las sumas con un resultado igual a nueve, este juego es llamado en el aula como las "escaleras". Algunos alumnos destacan en el ámbito lógico-matemático, (Teoría de las inteligencias múltiples) entre otros. En cambio otros alumnos les cuesta mucho este tipo de inteligencia, en parte por la falta de atención o interés. 

Tras la explicación, los alumnos comenzaron a realizar la ficha del número nueve hasta que llegó la maestra de religión. Momento en el cual se mezclan dos clases, la de cuatro años con la de cinco años. Continuaron con la actividad del día anterior sobre la "mariposa rosa" recordando entre todos los alumnos la historia y terminando la ficha correspondiente. En dicha clase se mostraron trabajadores aunque no en muchos casos no siguieron las normas indicadas en la ficha. No por falta de atención sino porque querían colorear todos los dibujos. 

Al finalizar la clase de religión los niños comenzaron a desayunar incluyendo el plato de fruta diario, la manzana, Un aspecto a destacar es el hecho de que uno de los alumnos que no solía comer adecuadamente tras una indagación diaria descubrimos que la comida y bebida que compraba su madre no le gustaba (zumo de frutas y bocadillo de nocilla). Le dijimos que se lo dijera a mamá para que le comprara otro tipo de zumo y bocadillo. 

Durante el recreo, mientras los alumnos estaban en el patio preparé la actividad para mi intervención “Ponle pelo y cola a Camellín" donde preparé el circuito, los carteles, puzles y antifaces necesarios para la actividad. Una vez llegaron los niños se sentaron ante los carteles del camello y el dromedario. En primer lugar, puse las reglas: para hablar se levanta la mano, no se empuja, y primero hacen la actividad los que mejor se porten. Hablamos sobre dichos animales, de los cactus, de los oasis, de los Tuareg, de sus cualidades, características... Después expliqué el primer recorrido que estaba marcado con flechas amarillas en el suelo, aprovechando para repasar además los colores en inglés.

Todos hicieron el recorrido muy bien mostrándose participativos, una vez que todos finalizaron notándose un gran cambio en los tiempos entre los niños expliqué el camino verde, el cual se hacía en parejas. Donde uno de ellos decía tener los ojos cerrados (antifaces). En este momento fijé mi atención en una alumna que suele ser miedosa y que en un principio no quiso taparse los ojos, pero que al final todos querían repetir una y otra vez. Por lo que la profesora propuso repetir al día siguiente en el patio. 

Tras la actividad, expliqué una ficha sobre el desierto, que simulaba el recorrido que habíamos hecho en clase. El ayudante repartió la ficha, y los alumnos la colorearon como indiqué. Algunos de los alumnos plasmaron en la ficha lo aprendido durante la actividad, mostrándose algunos entusiasmados y queriendo recortar el mapa y  llevársela  a casa. Incluso al finalizar jugaban a que la clase era el recorrido del mapa y tenían que encontrar un tesoro.

Mientras los alumnos hacían la ficha la maestra los llamaba uno a uno para hacer la lectura diaria. Además de acabar la ficha sobre el nueve con temperas aquellos alumnos y alumnas que no lo habían acabado en la mañana.  Pudiendo después jugar a lo que quisieran. Algunos colorearon, otros recortaron revistas, otros con plástilina... Para finalizar el día, una vez que los niños estaban preparados para ir a casa (mochilas y chaquetones puestos) pusimos dos vídeos, sobre la amistad. 

Un viernes bastante tranquilo.

Hoy he comenzado el día llevando al aula casi los últimos materiales necesarios para mi intervención educativa. Después fui al patio con el resto de las maestras para recibir a los alumnos.

Tras ello, fuimos al aula donde una alumna trato los temas usuales de la asamblea  y otros como la actividad del libro viajero que comenzará en este fin de semana. Además la maestra repaso la letra “b” con ayuda del cuento de la “Presumida B” de la colección de “Letrilandia” y de los demás personajes para trabajar dichos sonidos con las vocales. Durante este momento todos se mostraron interesados y atentos exceptuando uno . Intenté que se sentara correctamente y escuchara pero fue imposible. Así, que probé con el tiempo fuera y con el refuerzo positivo (verbal) que resultó un poco mejor.

Después la maestra explicó una ficha sobre los medios de transporte donde además de estos se trabajaba: las formas, la escritura y  los números ordinales y cardinales. Mientras los alumnos realizaban dicha ficha, uno de los alumnos que tienen un ritmo de aprendizaje menor trabajo conmigo los números (símbolo y significado), las vocales y los colores (confunde los nombres de los colores sobre todo verde, rojo y azul).

Al acabar, los alumnos tuvieron juego libre, exceptuando dos de ellos, que tardaron más en su tarea. Me puse primero con uno que al concentrarse terminó rápidamente y se fue con el resto de sus compañeros a jugar. Luego me puse con el otro alumno al que le faltaba la tarea, a este alumno le cuesta mucho mantener la concentración, distrayéndose ante sucesos irrelevantes. Conforme iban acabando la actividad correspondiente podían jugar libremente o usar plastilina como habitualmente. De nuevo el alumno que suele tardar más en hacer sus ejercicios se quedó sin jugar.

Tras  recoger los juguetes, lápices… se les repartió el desayuno a aquellos alumnos que se los da el centro y los demás sacaron el suyo propio de la mochila. Además de ello, el centro (por una ayuda concedida por la Junta de Andalucía) repartió un plato con trozos de manzana y galletas. Que se repartió entre todos los alumnos y del cual  comieron al menos un trozo.

Durante el recreo estuve en el aula un rato, ordenando y posteriormente redactando el diario de clase. Cuando los alumnos subieron hicieron muy bien la clase de relajación recompensando con cosquillitas aquellos comportamientos que quiero que se repitan. Utilizando tanto el aprendizaje directo como el vicario como recurso educativo.

Después de la clase de relajación los niños se lavaron las manos, uno de ellos se negaba a lavárselas y tuve que ser muy paciente hasta que por fin fue. (Sigue siendo reticente a cumplir las órdenes). Una vez que estuvimos todos en la clase se realizó una pequeña asamblea para tratar temas como: el cuidar los objetos, el no pelearse… Además la profesora explicó una ficha sobre la letra “b” donde los niños trabajaban el trazo de la letra y debían colorear objetos y animales que contuvieran dicha letra y tachar aquellos que no la tuvieran. Por detrás de la hoja, repasamos las sumas y las restas. Realizando además el dibujo que ellos quisieran. En general todos los alumnos con un poco de ayuda lograron hacer las fichas sin problemas. Como punto a destacar tenemos a dos alumnos: uno de ellos necesita adaptaciones en las actividades numéricas (repetir el número 1 y 2) además de una mayor atención. El otro alumno muestra falta de atención y una gran actividad motriz, necesitando mayor atención por parte de las maestras. 

Tras realizar dicha ficha los alumnos podían realizar una corona donde tenían que hacer: troquelado, colorear y en algunos casos recortar y pegar. Ya que a los últimos alumnos se les ocurrió la idea de pegar objetos de revistar y los ayude, supervisé y fomente su creatividad. En un principio me pidieron que mientras que coloreaban les recortara objetos de las revistas y luego fueron ellos mismo los que cortaron y pegaron aquello que quisieron. Después de realiza la ficha como es habitual los alumnos podían jugar a lo que ellos quisieran, mientras que la maestra los iba llamando para hacer su lectura diaria.

Durante el juego, observé que uno de los alumnos estaba llorando, en un principio solo me quede mirando si ellos mismos resolvían el conflicto. Al ver que no iba bien la cosa intervine. Hablando con los niños implicados llegando a un entendimiento. Y posteriormente, siguieron jugando juntos. Finalmente los alumnos ayudaron entre todos a recoger la clase y se prepararon para ir al comedor.

¡Jueves de pocos niños!

Hoy he llegado al colegio unos minutos antes para llevar algunos materiales para llevar a cabo mi intervención. Después fui al patio para recibir a los alumnos. De todos ellos solo asistieron cuatro, tres chicos y una chica. Tras la recepción, fuimos a la clase de usos múltiples donde por problemas con el ordenador la profesora contó un cuento. Mostrándose los alumnos atentos e interesados. Luego, subimos al aula, donde el encargado de hoy hizo los temas que se tratan durante esta tanto en español como en inglés. También hablamos con los niños sobre la huelga, ya que sentían curiosidad. Claro está, a un nivel que ellos pudieran comprender. Además se trató un pequeño conflicto entre dos alumnos que quedó solucionado rápidamente. 

Tras ello, la profesora contó el cuento de la señora "b" y los niños repasaron con el dedo la dirección en la que se debe escribir la "b". Después todos nos sentamos en círculo en el suelo donde nos ayudamos de una pequeña pizarra de tiza y las regletas para que los alumnos sumaran y restaran. Dos de ellos no estaban atentos y no comprendían bien estos conceptos. Se les dejó además un tiempo para que manipularan las regletas a su antojo. Luego, la maestra les explicó una ficha donde debían colorear con lápices y pinturas a la "señora b" y hacer unas sumas y restas. Mostrando algo de dificultad para diferenciar estos conceptos sobre todo los niños ya mencionados anteriormente. Uno de ellos se puso incluso a llorar por que se quedó el último haciendo esta actividad, mientras que sus compañeros estaban ya jugando. Le expliqué que todo tiene su momento, hay que trabajar un poco y después se puede jugar. Tras calmarse, se puso a trabajar más concentrado pero al acabar tocaba desayunar y no se quedó muy conforme. Aunque, tras el recreo ya se le había pasado. Para el desayuno además de lo correspondiente, los alumnos pudieron disfrutar de un plato de fresas con azúcar a excepción de uno de ellos que dice que no le gustan aunque siempre fomentamos que al menos las prueben. 

 Durante dicho recreo, colgué los carteles sobre el día de la mujer y cuando acabé me incorpore de nuevo al aula. Una vez allí, di de leer a todos los alumnos detectando y apuntando en la hoja de la profesora que debía repasar cada alumno. Tras leer los niños jugaron libremente, y cuando todos hubieron leído una alumna pidió que jugáramos juntas. Le dije que era más divertido jugar con los demás compañeros pero no quiso. Saco piezas de maderas con letras y números y jugamos a reconocerlos y nombrar objetos que tuvieran esa letra. Después sacó un puzle sobre el cuerpo humano y lo montó correctamente y usando su asombroso razonamiento. Al acabar, se dio cuenta que faltaban un brazo y una pierna y todos los alumnos ayudaron a buscarlos. Pero desafortunadamente, solo encontraron el brazo. 

Para acabar los niños en ambas ocasiones tanto en el primer juego libre como antes de irse al comedor recogieron los juguetes, observando que jugaban tanto con muñecos de acción como con los muñecos de las casitas. Tras recoger la clase y coger las mochilas vieron dos vídeos, uno sobre la amabilidad y otro sobre las rabietas. Antes de ir al comedor todos se despidieron con un beso.

¡Miércoles de no parar!

Hoy he ido un poco antes al colegio para llevar otros materiales que voy a usar en mi intervención. Después fui con el resto de maestras para recibir a los alumnos y alumnas. Me fijé en dos cosas relevantes en este momento, la primera es que uno de los alumnos llegó llorando porque según decía hoy no quería ir al colegio. Junto con su hermano del que nunca se separa se consolaron entre ellos hasta que se calmó. Por otro lado, observe que una de las alumnas corría con algo en las manos, así que le pedí que me lo enseñara. Se había traído de su casa unos palillos bastante afilados de su casa. Le di dos opciones o los guardaba en la mochila o se los guardaba yo. En un principio se mostró reticente a obedecer, pero al final decidió que yo se los guardara y una vez en clase me los pidió para guardarlos en la mochila.

Después fuimos al aula de usos múltiples, ayudándonos de la pizarra digital para que los niños practicaran la lectura. Hoy se mostraban más atentos e incluso la maestra me dejo un rato al cargo. Después se la profesora leyó el cuento de “La bruja Belinda” y repasamos la “B”.

Tras esta actividad, vino la profesora de religión junto con los alumnos de cuatro y cinco años. La actividad de hoy era un cuento sobre la primavera y su posterior dramatización por los alumnos y alumnas. Pero estos, se mostraban distraídos y no participativos. Se quejaban de los papeles y no seguían la guía de la maestra, así que intenté ayudar sin molestar en el progreso de su clase.

Después de la clase de religión, desayunaron y compartimos entre todos trocitos de manzana donde casi todos los niños comieron con gusto a excepción de uno. Luego vino la profesora de inglés que utilizando la mayoría del tiempo dicho idioma les explico una ficha sobre los medios de transportes en las que los niños tenían que recortar, unir las piezas del puzle y pegar las piezas de forma correcta.

Durante el recreo hubo un pequeño incidente con uno de los alumnos en los que pego a otro. Hable con el para que eso no volviera a suceder aunque se no fue así. Después los niños, maestros y demás profesionales del centro salieron al patio durante media hora para celebrar el día internacional de la mujer, mientras yo ayudaba con unos carteles para dicha celebración. Cuando acabe me uní a ella.

Tras esta actividad subimos a clase, se lavaron las manos e hicimos un poco de relajación. Entonces sonó la alarma de incendios a modo de ensayo. Y todos las clases actuaron siguiendo el protocolo que era: bajar persianas, cerrar las clases y demás clases comprobando que no quedaran alumnos y salir al patio de forma ordenada habiendo contado previamente a los alumnos y alumnas.